martes, 21 de julio de 2009

¿QUE TANTO SABES DE EL? Ch.19

Basado en Gravitation
By Ishida Rio

Gravitation no me pertenece. Todos los créditos a Murakami Maki-san.

Viernes 2 de Mayo de 2003

Sobre carga de azúcar, ojo los diabéticos. capitulo meloso.

Capítulo 19.

Ahora si que estaba asombrado, ¡debía estar soñando!... ¿Eiri Yuki en su puerta?,

¿Eiri Yuki buscándolo para ir a su reunión?

-¿Qué pasa?

-... Me... parece tan raro que esté haciendo esto...

-¿Crees que lo hago por algún motivo en especial?

-... Ni siquiera se me ocurre que podría pasar por su cabeza en este momento. Solo pienso que no es usted... que estoy soñando...

-¿Tan malo soy? -preguntó con una sonrisa maliciosa-

-¡No! solo....

Eiri esperó las siguientes palabras del guitarrista con la cara apuntando al techo pero la mirada hacia el muchacho.

-La mujer y el niño no estarán. K hablará contigo.

-¿Hablar?... ¿de qué?

-De algo que ustedes, estoy seguro, tienen pendiente... Algo sobre lo que conversamos el otro día...

Nakano miró a Yuki con curiosidad y algo de susto.

-¿Cómo sabe que....?

-Te lo dije Hiro -interrumpió colocándose sus gafas negras- Te observo más de lo que crees.... ¿Vamos ya?

-Pero...

-Shuichi espera.

-Pero...

-Además tienen el itinerario del MPS

-Pero...

-Nada de peros, vamos.

-¡Yuki-san usted no entiende!

-...¿Qué no entiendo?, ¿que no quieras verlo?, ¿que sientas vergüenza de pensar que te quiere solo como amante?... ¿temes que te presente "como un amigo" a su esposa y a su hijo?

Cuando Eiri volteó a ver a Hiro, recordó el poco tacto que tenía....

Mientras, en la cabeza de Nakano resonaban las palabras del novelista...


“Vergüenza...”

“Solo como amante....”

¡¿Porqué tenía que ser tan duro?!... el ya lo había pensado... ¡Pero él lo decía tan fácil!, porque no podía al menos suavizar la voz...

-Em...Gomen ne...Hiro... Oi, vamos, se que es difícil aunque lo diga así como si fuera tan fácil como ir a la esquina a comprar algo. -los ojos llorosos de Nakano se clavaron en el en una silenciosa súplica- No Hiro, dije que te llevaría. Hazlo por la banda, se profesional... Y si te sientes tan mal que ya no aguantas... pues me dices y yo te saco de ahí...

Era un sueño, definitivamente un sueño.

-...Usted... -balbuceó Hiro en medio de sollozos- Usted no es Yuki-san...

-¿Qué?, ¿acaso nadie puede cambiar aunque sea un poco?

-No es poco hablando de Eiri Yuki-san... Insisto en que no es usted...

-Entonces comienza a creer en milagros muchacho.

Ya sin poder aguantar las ganas de desahogarse, Hiroshi se lanzó al cuello de Yuki llorando abiertamente. Tenía tanto miedo... y la persona que menos hubiera pensado en el mundo lo estaba ayudando a superar algo que escapaba a la imaginación del rubio. Una sombra tan lejana, tan dolorosa...

Yuki cayó hacia atrás con el guitarrista colgado a su cuello. Sus ojos se abrieron de sorpresa, sin poder imaginar aún que tanto podía arrastrar ese chico en su pasado como para comportarse así. Sin embargo, algo nuevo nació en el... no era lástima, no era compasión... Ese sentimiento, esas ganas de ayudar que tenía de niño... ¿Quien diría que justamente "el amigo chascón" le ayudaría a recuperar esa faceta que creía perdida para siempre?. Y ahora podía recuperar también esos deseos de abrazar a alguien sin culpa... Era solo estirar los brazos y pasarlos alrededor del frágil cuerpo de Nakano... Su corazón se entristeció al pensar que no sería Shuichi el receptor de ese abrazo tan importante, pero como decían por ahí "El doctor es para los enfermos" y Shu tenía en exclusiva cosas mucho más importantes que un simple abrazo...

-¿Cuando contarás tu historia triste Hiro? -dijo al estrecharlo contra su cuerpo y sentir su delgadez-

-... No lo se...

Minutos después, Nakano se levantó con las mejillas rojas y los ojos hinchados. Eiri se levantó también.

-Date un baño, te espero aquí. Los demás han de estar preocupados.

En silencio, Hiro se levantó y caminó hasta su pieza para luego entrar al baño con toallas y ropa en la mano. Eiri se sintió más tranquilo al verlo. El mejor que nadie sabía lo difícil que era guardar un secreto cuando el amor toca a la puerta.

-“Sé que es difícil Hiro-kun... créeme que lo sé...“

***

Cuando el timbre sonó por fin, Shuichi fue corriendo a abrir sin dejar que nadie se le adelantara.

-Hola otra vez -dijo Yuki. Tras él entró Hiroshi un poco más animado, pero demasiado tranquilo.-

-Ohayo... gomen por la tardanza -se disculpó con una venia. K los observó y desvió la mirada.-

-Well, por fin les podré informar.

-¿Qué pasó? -preguntó en un susurro Fujisaki cuando el otro se sentó junto a él-

-Nada Fujisaki-kun -sonrió Hiro- Mejor escuchamos.

El itinerario sacado en copias impresionó a Bad Luck que veían como en 72 horas tenían que co-animar, cantar con otros 4 grupos distintos, separados y mezclados con otros 3 grupos distintos a los anteriores, dar conferencias de prensa, lanzar el video-clip nuevo... y obviamente cantar solos...

Hiroshi sonrió al ver el programa. Por fin algo que lo distraería.

Fujisaki sonrió a medias... Era, sin duda, una gran oportunidad de demostrar su talento, aunque también era un gran desafío.

Shuichi lloró sonoramente... No podría ver a Yuki.

Y mientras, Eiri fumaba un poco en el balcón. Si bien lo correcto hubiera sido marcharse, había prometido a Hiro estar ahí en caso de necesitarlo. De vez en cuando, sentía la mirada castaña en su espalda y de tanto en tanto aparecía en la sala para asegurarse, disimuladamente, que todo iba bien.

Menos de una hora duró en general la reunión. Bastante menos de lo que Nakano tardó en llegar.

-¿Estás bien Hiro? -preguntó el tecladista cuando K fue a la cocina a buscar unos bocadillos y Yuki fue al baño- Te ves cansado.

-No te preocupes, solo no he dormido bien.

-Pero...

-Calma, todo estará bien para el concierto ¿ne Shuichi?

-¡¡Siii!!

-Olvídate del concierto por un momento y piensa en lo que te estoy preguntando.

Hiroshi quedó blanco al oír a su compañero. ¿Suguru Fujisaki diciendo que se olviden del trabajo?, ¿Suguru Fujisaki preguntando por su salud?

-Creo que todos están locos hoy -dijo-

-Entonces no me vas a contar.

-Lo que pasa Fujisaki-kun... es que tengo un problema del tipo amoroso -comentó burlón pasando su brazo por los hombros del tecladista- Y estoy un poquito complicado.

-Oh... ¿pero estás bien?

-...Claro que si.

Luego de los bocadillos y comentarios posteriores a la reunión, Fujisaki anunció que debía irse a su casa.

-Si quieres ven al departamento en la noche -dijo Shuichi cuando su compañero se retiraba- Así celebramos nuestra participación en el MPS. Usted también esta invitado K-san.

-Good!

-Lo intentaré. Nos vemos.

Cuando el chico se fue, Eiri se afanó escribiendo un mensaje de texto por su celular. Shindo lo notó y le preguntó a quien se lo enviaba.

-A mi editora.

El cantante quedó con una gran signo de interrogación en su cabeza. Su pareja nunca le enviaba mensajes de texto a Mizuki-san... Además, hace días que no escribía nada... ¿pediría más plazo?... En eso, suena su celular.

-Moshi moshi, Shindo desu...

-“¡Shuichi!, estamos en el parque, ¿porqué no vienes hay unos juegos que te van a encantar...”

Acompañando la voz de Yamato, se oían los gritos eufóricos de Ryuichi y las risas de Noriko y Judy.

-Me encantaría Yamato-san pero... -el aparato desaparece de un momento a otro de sus manos-

-Claro Yamato, ¿en el parque dijiste?

-“Hai Eiri-san.”

-Bien, lo voy a dejar, estamos en 5 minutos allá.

-Yuki....

-Vamos Shu... -con poco disimulo, Eiri empuja a su pareja hacia la puerta-

-¿No quieres ir Hiro...?

-Hiro no puede ir. Vamos Shuichi....

-Pero...

-¿Cierto que no puedes ir Hiro-kun? -dice Yuki- ¿Ves?, no puede.

-¡Pero si no dijo nada!

-Vamos, vamos...

A empujones ambos llegaron al estacionamiento del edificio, en donde de un violento movimiento, Shuichi se libra de las acciones de Eiri.

-¡Basta ya! -grita. El rubio lo mira sorprendido-

-¿Qué...?

-¡Quiero que me digas ahora que le pasa a Hiroshi!

-Está cansado.

-¡No mientas Yuki!

Definitivamente Shuichi podía ser muy cambiante pensó el otro. Pero la paciencia y el autocontrol de Shindo se habían ido a la basura con lo que había pasado, ya que ahora lo entendía. El mensaje de texto era, obviamente, para Yamato, a ver si lo sacaba del departamento. ¡Su teléfono había sonado al instante después de enviarlo!. Y esa indiscriminada y descarada manera de sacarlo... ¡Ya no aguantaba!

-¡Dime de una vez!

-...Yo tampoco sé que le pasa...

-¡Mentiroso! -la rabia contenida en las palabras del cantante descolocaron completamente a Yuki- ¡Mientes!, ¡y no voy a permitir que me guardes secretos que tengan que ver con Hiro!

Eiri puso sus manos en su cintura intentando parecer imponente y cortar el tema, pero Shindo se paró de una forma sumamente arrogante, y a la vez... ¿peligrosa?... Los puños cerrados cayendo junto a sus piernas, el pecho inflado y la mirada baja y entrecerrada, pero fija en el.... El rubio puso su mirada más dura, a ver si tantos años de frialdad y aislamiento le ayudaban en ese momento... pero Shuichi respondió con un fulgor violeta que desarmó la defensa de Eiri.

-¿Acaso el chico no puede tener un problema sin contártelo? -preguntó intentando cerrar el tema aludiendo a los sentimientos de culpa que fácilmente afloraban en su pareja.

-Por supuesto que no.

Arrogancia, determinación, rabia... Ese no era el Shindo Shuichi que conocía...

-Hiro no quiere que te preocupes. -dijo caminando hacia el auto- Es todo.

-¿Y porqué confiar en tí?

Los ojos dorados de Yuki se abrieron de sorpresa...

-Pero...

-¡Tú y Hiro no se llevan!... ¡¿porqué confió en tí?!

-... Porque tu vida ha sido tan color de rosa que no serías capaz de entenderlo y mucho menos ayudarlo.

Asunto terminado. Esos ojos que conocía bien volvieron, la postura se desvaneció para dar paso al Shuichi al que estaba acostumbrado.... Pero algo había distinto... aunque no supo que era.

-Shuichi...

-Vamos de una vez.

El portazo que Shu dio al entrar en el auto resonó en los oídos de su pareja durante varios segundos, no por la fuerza ni nada, sino por la frialdad que demostró con su última frase...

“Vamos de una vez...”

-¿Hiro tuvo algún problema en el pasado Shu? -preguntó al parar en una luz roja-

-Muchos.

-¿Alguno en especial doloroso?

-... Muchos...

Eiri apretó los puños. Diablos, estaban a punto de llegar al parque y no iba a lograr que su amante le dijera algo más.

-Alguien se le declaró a Hiro. -Shuichi lo miró con los ojos muy abiertos y una expresión de indescriptible sorpresa ... y susto-

-¡¡¿Qué?!!

-Si... eso fue lo que me dijo.... -tartamudeó mirando de reojo a Shindo-

-Pero... -un enorme y triste suspiro salió de la garganta del cantante- Ahora entiendo....

El auto se detuvo. Los juegos del parque se veían por todas partes.

-Shuichi....

-No vengas a buscarme Yuki -Shindo dio un rápido beso a Eiri y bajó del auto- Cuidalo por mí.... -y se fue rápidamente al encuentro de los otros, a los que ya había divisado.

Casi sin darse cuenta, Yuki estaba de vuelta en el estacionamiento del edificio en donde vivía K. Una extraña pena inundaba su alma de una forma tan agobiante que creía que iba a romper en llanto. Sin embargo no pasó mucho tiempo antes de reconocer el motivo del sentimiento... El creía que un nuevo Shuichi le había sido revelado: un muchacho sinceramente alegre, un chico que disfrutaba de la compañía de su familia y de su trabajo... sentimientos mucho más puros que los que él ya conocía en el pelirrosa... y ahora...

“Todos tenemos las manos manchadas, aunque ahora portemos armas, guitarras o micrófonos...

-No....

El escritor apoyó las manos en el volante y la frente en ellas. Así cerró los ojos y se dejó arrullar por el silencio, esperando la salida de Nakano.

***

El sonido de la puerta cerrarse provocó en Hiroshi una inconfundible sensación de debilidad y vulnerabilidad que conoció hacía tantos años.

Su mente se concentró en el presente. Estaba con K en su departamento, para conversar sobre la supuesta confesión de amor. Estaba ahí porque Yuki-san lo había llevado y porque sabía que estaría cerca en caso de necesitar salir...

-Em..Hiro...

-Usted... usted dirá K-san...

Lentamente el americano tomó las manos de Nakano entre las suyas. El guitarrista sintió el temblor en esas manos fuertes y hermosas y sonrió por lo bajo.

-Hiro... yo no sabía que vendrían... -dijo en tono de disculpa- Te lo juro... yo nunca he querido jugar contigo... nunca...

-K-san... sobre lo que dijo la otra vez... -murmuró sin enfrentar los ojos azules de K... tan parecidos a los de Yamato-

-...Te amo Hiro... te amo mucho... En cuanto a Judy... hace mucho que dejamos de vivir juntos, pero por Miky no hemos dejado del todo nuestra "relación" como casados... pero no hay nada entre nosotros... Ella es ahora una buena amiga... y me hace el favor de traerme a Miky...

Una perla cristalina cayó desde la mirada de Hiroshi, que seguía clavada en las manos del rubio. K sin embargo la notó, y con delicadeza levantó el mentón del otro, obligándolo suavemente a mirarlo.

-¿What's wrong?... -una lágrima más se deslizó provocando los más increíbles sentimientos de ternura en K- Entiendo si no sientes lo mismo...

-K-san... -con el dorso se limpió y aclaró la voz antes de seguir- Es cierto... es cierto que no lo amo... -el americano desvió la mirada- pero... pero necesito de alguien... me siento tan solo... Es cierto que no lo amo... pero puedo hacerlo...

Esta vez fueron las delicadas manos del castaño las que buscaron las de K. Este lo miraba sorprendido, sin entender del todo lo que el guitarrista le estaba diciendo.

-Hay muchas cosas que arrastro... y que debo aclarar... pero me siento solo y odio esta sensación... No es una búsqueda desesperada, para eso buscaría una prostituta o una fan dispuesta a algo más que un autógrafo...

Antes que se diera cuenta, Hiro estaba siendo jalado con fuerza, para quedar atrapado en un abrazo tan fuerte, tan poderoso... tan protector y tierno que deseó no salir nunca de esos brazos. La imagen y la sensación de Nekoi en su cama volvió a su mente, pero no logró opacar la sensación tan abrumante que sentía. Esto era mejor que Yamato... era mejor que cualquiera de las personas con las que estuvo alguna vez... Ese abrazo era sencillamente lo que necesitaba.

Por su parte, K estrechaba contra su cuerpo esa delgada figura esperando no romperla. Si bien el muchacho no correspondía sus sentimientos, estaba dispuesto a ser "víctima" de una seducción abierta y desinteresada... Estaba dispuesto a quererlo... a darle la oportunidad de amarlo y ser ambos felices.

-Te amo Hiro... y voy a lograr que me quieras...

-“...Confío en usted K-san...”

Un suave beso los unió cuando el abrazo se rompió al fin. K rodeó con sus brazos la cintura del otro, atrayéndolo lo más que pudo, hurgando y explorando esa boca deseada cada vez con más pasión. Sin embargo un leve empujón de Nakano lo devolvió a la realidad.

-Nos vemos K-san... -dijo con una tímida sonrisa y las mejillas sonrojadas-

-...Nos, vemos ...Hiro

El sonido de la puerta fue casi imperceptible. K quedó sobre el sillón meditando entre la sorpresa del beso y las palabras de Hiroshi, mientras una enorme sonrisa aparecía en sus labios.

***

Se podría decir que Yuki despertó de golpe cuando sintió el movimiento del auto. Sus ojos se abrieron lentamente y le costó bastante reconocer a Hiro.

-¿Estás bien? -él asintió recuperando el aliento, mirando la guantera fijamente-

¿Seguro? -otra vez lo mismo- Bien, ¿te llevo a casa?

-No le diré nada

-¿Eh....?

-K-san no sabrá nada.... El quiere hacerme feliz... y no dejaré que mis errores arruinen esta oportunidad que tengo...

La curiosidad de Eiri por saber lo que hacía que Hiro se sintiera así era cada vez mayor, pero sabía la indiscreción y el error que podía ser preguntarlo abiertamente. Además, con sus palabras el guitarrista había dejado mas o menos claro que no quería hablar más del tema, que lo olvidaría para ser feliz. Pero el ya lo había intentado... y no era tan fácil.

-¿Estás seguro de dejarlo avanzar?

-... Seguro Yuki-san. -al verlo, el rubio notó una suave sonrisa en la cara tostada de Nakano, y pensó que sería lo mejor-

-Me alegro.


El auto partió en silencio. Eran más de las 8. Los demás ya debían estar en casa preparando la celebración por la presentación de Bad Luck en el Mega Pop Star.

-¿Irás después o vamos ahora mismo?

-... Mejor vamos ahora.

Sonrisas en ambos. Algo distinto estaba por comenzar, y algo inesperado por ocurrir. Los grandes cambios se venían encima, y no todos serían malos... aunque tampoco todos serían buenos...

No hay comentarios:

Publicar un comentario