jueves, 13 de agosto de 2009

¿QUE TANTO SABES DE EL? Ch.21

Basado en Gravitation
By Ishida Rio

Gravitation no me pertenece. Todos los créditos a Murakami Maki-san.

Jueves 8 de Mayo de 2003, 20:50:19

Capítulo 21.

Diciembre 30

Las cortinas estaban cerradas. La luz no se filtraba por ningún lado, ni siquiera la más mínima línea de luminosidad pasaba a la sala. El silencio reinaba mientras el olor a alcohol saturaba las narices.

Casi sin darse cuenta Fujisaki avisó a su casa que estaba en donde los Shindo.

-Si mamá... -susurraba tomando su cabeza con ambas manos- si... estoy bien... chao mamá...

Casi sin darse cuenta, volvió a la cama, junto a los hermanos Nakano y a K, todos durmiendo como si fueran muertos. Suguru no se fijó en sus "acompañantes" de cama, y haciendo a un lado la pierna de Yuuji, se tiró sobre el colchón, cerrando los ojos nuevamente.

Eran las 10.30. Y era 30 de diciembre. Deberían estar ensayando para el MPS... pero Hiroshi estaba durmiendo, Fujisaki también lo hacía y Shuichi estaba evocado a vaciar su estómago en el inodoro. Ni un alma más rondaba el departamento. Nadie se acordaba que Ryuichi llegaría en cualquier momento con Omi, Miky, Judy y Noriko. Nadie recordaba que Tohma les había advertido que de no aparecer ese día, los iría a buscar al departamento luego de saber que celebrarían.

Y vaya suerte que las camas fueran todas matrimoniales, excepto la de Omi que nadie usó. Mientras en la cama de Kotaro se encontraban este, Yuki y Shuichi, en la de la pareja de asesinos estaban el tecladista y el guitarrista de Bad Luck junto al hermano de este último, y en la de Yuki y Shuichi se encontraban Haruno, Yamato y K, que después de ir al baño, simplemente optó por la primera puerta que encontró.

Y eran las 4.15pm cuando la puerta comenzó a sonar, dado los fuertes golpes que le propinaban.

-¡Abran! -gritó Tohma- ¡Se los advertí!

Pero nadie aparecía... Yuki abrió un ojo sintiendo los golpes como martillos sobre su cabeza. Puso la almohada sobre su cabeza, pero la mano de Shuichi lo tocó.

-Yuki....

-¿Mm....?

-....Ve a ver....

-Mmmmm

-Si no lo haces ellos se van a levantar y le van a dar un tiro al que está tocando.

-Mmm...

-Como digas...

La puerta del lado se abrió y tres pares de pasos sonaron: Haruno, Yamato y K. Los tres arma en mano. Nekoi abrió, Shindo se mantuvo a un lado y el americano disparó sin ver siquiera a donde lo hacía.

-¡¡Mister K!!

La aterrorizada voz de Seguchi hizo que el otro bajara la vista. El ex-tecladista de Nittle Grasper vio ojos enrojecidos y sintió el penetrante aroma a alcohol que el departamento entero expelía.

-Que asco... -dijo tapándose la nariz y entrando sin ser invitado. Los asesinos se retiraron a su dormitorio, seguros de matar al tipo si no dormían 15 minutos más-¿Qué significa esto K? -gritó Tohma indicando las botellas vacías de tequila y demases- ¡Tenemos un concierto...!

-¡No grites! -cortó el otro- Oh my god... me revienta la cabeza...

-Voy a abrir las ventanas...

-No lo hagas con las cortinas....

Pronto el aire fresco comenzó a luchar con la pestilencia del interior y Seguchi sintió que podía respirar un poco más.

-¿Porqué Bad Luck no está en el edificio como ordené?

-Sleeping...

-Pues despiértelos K-san... -gruñó aguantando la rabia-

-...Al diablo Seguchi... en las condiciones en las que estamos no podemos ni prender una ampolleta, no podremos estar afuera. -gruñó retirándose a dormir el también-

-¡Pero....!

-¿Podrías dejar de gritar? -la voz de Eiri sobresaltó al rubio-

-Eiri-san...

-Bien, hasta que hablas bajo.... -el escritor se sentó pesadamente en el sillón mas cercano y prendió un cigarrillo- Bad Luck no estará disponible hoy... su manager tampoco...

-Pero...

-Nada de peros Tohma, vete a tu oficina y déjanos descansar que estamos...

-Ebrios... todos están ebrios. -Tohma observó el maltratado aspecto de su "hermano" y tomó su manos- Eiri-san, deja que te saque de aquí... esta gente... la familia de ese mocoso... No es bueno que estés con ellos.

-¿Porqué? -preguntó duramente soltando su mano. Él miró hacia todos lados y luego se acercó al rubio para susurrar-

-Esa mujer me disparó en mi oficina el día del concierto de Navidad. Te juro que es cierto... Quiso matarme...

-Yo no quise matarlo. -dijo Haruno sentándose al lado de Yuki-

-¡Tú!

-Solo quise asustarlo.

-...No ... no.. mientas...

-No fallaría a tan corta distancia.

-Eres de lo peor... -en ese momento Seguchi siente algo frío en su nuca y como el seguro de un arma era retirado.-

-¿Y como es la gente que hace tratos con mafiosos eh? -era Yamato- Porque no creo que sea muy... como decirlo... "honorable" de su parte mandar gente a matar a su amigo y al hermano de Eiri-san a su departamento ¿verdad?

-¿Qué? -la mirada del escritor fue como un latigazo sobre Tohma-

-No se preocupe Tohma-san... -dijo Haruno- Bad Luck irá mañana a primera hora a trabajar.

-Gracias por visitarnos Seguchi-san

El rubio los miró aterrados y una gran pena se apoderó de él cuando sus ojos se posaron en Yuki. El escritor lo miraba con frialdad y desprecio... Era más de lo que podía aguantar....

Cuando la puerta se cerró los tres suspiraron y se tendieron en el sillón, a los minutos estaban dormidos otra vez.

A las 3.24pm, Kotaro apareció en la sala. Abrió un poco las cortinas y dejó que la luz de la tarde inundara el departamento. Aspiró el aire fresco y sintió que vomitaría de nuevo, pero antes de hacerlo puso agua a calentar. Todos necesitaban un café. Casi una hora después estaban todos en pie, bañados y con enormes tazones del negro líquido frente a ellos. Ninguno hablaba. La jaqueca era demasiado poderosa y el sonido de la tetera al sonar ya les había reventado los tímpanos. Daban gracias a todas las Divinidades que Ryuichi no haya ido a dejar a Omi y que Tohma se hubiera ido sin hacer mayores escándalos.

-Voy a comprar unas aspirinas -dijo Shuichi de repente- ¿Alguien me acompaña?

-Yo -dijo su primo- Necesito airearme un poco.

-Yo también, -acotó K- ya debo irme a casa de todos modos.

-¿Vienes Fujisaki?

-No gracias K-san, me tomaré primero el café.

Los tres salieron y Haruno se disculpó argumentando que iría a ordenar un poco las piezas. Yamato cocinaría algo suave y los Nakano ayudarían a la mujer. Solo Yuki y Suguru quedaron en la sala.

-¿En qué piensas? -preguntó el escritor al sentir el silencio. El muchacho sonrió y se negó a sonrojarse. Después de esa noche era ridículo hacerlo por una pregunta como esa-

-Nunca pensé que mi primera vez fuera a ser así...

-El alcohol hace perder la razón.

-Pero de todas formas no me desagradó. Es la primera vez que hago algo así, algo... loco, diferente a lo que he hecho toda mi vida.

-¿Te sientes libre? -el tecladista le brindó una gran sonrisa-

-Si.

-No te acostumbres a estas cosas eso si. No puedes darte el lujo de deteriorarte.

-Lo se Eiri-san, gracias.

El último trago de café y Fujisaki dejó la taza en la cocina, despidiéndose de Yamato, luego de los demás que estaban ordenando y finalmente volvió frente al escritor.

-Nos vemos Eiri-san.

-Nos vemos Suguru.

EL chico dio la vuelta, pero casi de inmediato volteó y robó un beso de los labios de Eiri. Este lo miró sorprendido, pero luego sonrió.

-No te acostumbres.

-Por eso lo hago ahora.

Sonriendo, Fujisaki partió a su casa, lo suficientemente repuesto como para que no sospecharan nada sus padres de la noche que había vivido.

Yuki miró hacia la puerta de la cocina y notó que Yamato lo observaba sonriendo.

-¿También? -preguntó. El otro asintió. Nekoi rió con ganas- Vaya muchacho....

Al rato llegaron Shuichi y Kotaro. Todos con aspirina en mano comenzaron a reír y conversar, esta vez acompañados solo de café y jugos naturales.

-Me siento un poco culpable de haber dejado que Fujisaki-kun estuviera... -dijo Shuichi aferrado a la cintura de Eiri.-

-¿Porqué Shu? -preguntó Yuuji-

-...Porque él es un chico común y corriente...

-Pero no le molestó -dijo Yuki- Además, estábamos todos ebrios Shu, no te mortifiques.

-Olvidémonos de Fujisaki -dijo Hiro- Hay que ver qué le vamos a decir a Seguchi-san mañana por la mañana.

-Debe estar furioso... ¿qué les dijo cuando vino?

-No dijo nada -contestó Eiri- Y mañana tampoco dirá nada.

Un momento de silencio se elevó. A nadie le molestó, hasta que Yuuji tosió.

-Oi Shuichi...

-¿Si Yuuji-san?

-¿Todas las bandas del MPS tendrán un cuerpo de seguridad verdad?...

¿guardaespaldas?

-Claro.

-¿Y con quien tenemos que hablar?

-...¿Hablar para qué?

-¿Cómo que para que? -interrumpió Nekoi- ¿Con quien registran a los guardaespaldas?

-Pues... K-san está encargado de eso...

-Bien chicos, entonces esta Tigresa debe ir a hablar con el americano.

-Pero Haruno...

-Tranquilo Shuichi, Bad Luck estará bajo la protección de las 4 Bestias...

-¿las... 4 bestias?

Nakano y Shindo se miraron sin entender.

-¡Byakko! -dijo Haruno-

-Sohryu -siguió Yamato-

-Suzaku -terminó Yuuji- Y Genbu...

-¿Y quien será Genbu? -preguntó Yuki-

-Pues Daisuke-sama, ¿quien mas?

Los músicos no cabían en si de la impresión, mientras Eiri apenas esbozaba lo que ese nombre significaba. Sabía que lo había oído, pero no recordaba donde. En eso...

Toc Toc Toc....

Nekoi fue a abrir la puerta y quedó de una pieza cuando vio quien estaba del otro lado.

-Mi...Mi...¡Mika-sama!

-¿Mika-sama?

-¿Mika-sama?

-¿Mika?

En efecto, Seguchi Mika entró en el departamento con la mirada muy seria.

-Me alegra encontrarlos muchachos.

Para sorpresa de Eiri, Shuichi y Hiro no se refería a ellos... Si no a los tres asesinos.

-Mika-sama. ¿desea algo?....

Rápidamente una mesa con una humeante taza de café, tostadas y mermelada. Haruno, Yamato y Yuuji se mantenían junto a la mesa de pie, desarmando sus armas, y presentando a la mujer los cargadores fuera de las pistolas, la bala que queda lista a ser disparada y el arma descargada.

-¿Qué significa esto....? -pasó a preguntar el escritor-

-Los asesinos tienen la obligación de desarmarse frente a sus jefes. -explicó Mika tranquilamente-

-Pero... ¿los conocías?

-Por supuesto Eiri. Y tú también los viste muchas veces –dijo sonriendo ante la curiosidad de su hermano- me aventuraría a decir que incluso jugaste un par de veces con Masato Shindo y con Yamato, pero tu memoria es más frágil que la mía.

-Pero...

-No veo a tu primo Byakko...

-Está ordenando algunas cosas Mika-sama, si desea lo llamo.

-Por favor.

Al momento siguiente los 4 estaban junto a la mesa mientras el escritor y los músicos observaban.

-Supe que Okura-san estará en la protección de Bad Luck.

-Así es Mika-sama.

-Tohma no está contento con eso. Si no se apresuran matones de Okura hijo estarán como el cuerpo de seguridad de la banda. -la mujer buscó en su bolso y entregó una carpeta a Yuuji- Toma esto Yuuji y entrégaselo a K-san inmediatamente. El arreglará lo demás.

-Como diga.

Nakano salió de inmediato del departamento con la carpeta bajo el brazo.

-Deben tener cuidado muchachos. ¿Supieron que Tohma envió matones con Sakuma-san y Tatsuha?

-Si Mika-sama. Afortunadamente Byakko andaba cerca -dijo Yamato-

-Ibas junto a Kiyosato-san ¿no Byakko?

-Eh... si Mika-sama.... iba en su auto cuando... cuando vi a los sujetos entrar en el edificio.

-¿Tatsuha y el otro los vieron?

-No alcanzaron a entrar.

-Me parece. Estaremos en contacto muchachos. Les intentaré informar lo más que pueda sobre los movimientos de Tohma ahora que está con Okura.

-Muchas gracias Mika-sama -dijeron los tres con una venia-

-Nunca imaginé las vueltas que daría la vida. –comentó ella mirando a Yuki y a los asesinos- Mi hermano pareja de un Shindo...

-Mika-sama... -empezó Nekoi- Es peligroso que usted ande sola por ahí. Okura podría tomar algún tipo de represalia.

-No te preocupes Sohryu. -sonrió- Se cuidarme.

Ella continuó con su café mientras los tres asesinos pensaban en un rincón, no lejos de Mika.

Eiri por otro lado miraba el techo intentando evocar recuerdos de su niñez. ¿Él jugando con Shindo Masato y Nekoi Yamato?, ¿y quién diablos era Shindo Masato?. Le había parecido oír ese nombre en alguno de los relatos de su pareja o la familia.

-Masato...

-El hermano de Kotaro -dijo Shuichi- Murió en una redada de la policía hace varios años. En realidad desapareció, nadie volvió a verlo nunca.

-Casi nos atrapan a todos aquella vez -comentó Hiroshi- Kotaro escapó apenas.

-Recuerdo un chico castaño en mis tiempos de niño... pero el otro era Tohma... siempre Tohma...

-Tohma y Sohryu se parecían un poco ¿no lo crees Eiri?, aunque, claro, ahora adultos no tienen nada en común.

-Mika... -la mujer se sentó junto a Nakano-

-Jugabas con un castaño y un rubio. Pero Tohma no llegó hasta que tenías unos 10 años. Antes jugabas con ESE rubio -apuntando a Nekoi-

-¡El destino nos quiere juntos Yuki! -gritó Shindo aferrándose a la cintura de su pareja-

EL reloj indicó las 19.00pm. La mujer se despidió y salió hacia su casa, pero al llegar a la puerta volteó y susurró algo a los asesinos.

-Yo también debo irme.

-¡Pero Hiro!

-Mi casa es un desastre Shu, debo ordenar un poco.

-¿Quieres que te vaya a dejar?

-No se preocupe Yuki-san, prefiero caminar.

Nakano se despidió de todos y salió tranquilo. Tomó el ascensor hasta la planta baja y caminó hasta la calle, en donde se encontró con su hermano.

-¿Te vas Hiro?

-Si, voy a ordenar un poco.

-Nos vemos entonces.

-Cuidate

-Igual.

Yuuji subió por el mismo camino que hizo el otro.

-¡Tadaima!

-¿Cómo te fue Yuuji?

-Bastante bien. Me crucé con Hiro abajo.

-¿Y qué eran los papeles que Mika te pasó? -preguntó Yuki-

-Registros. Cosas que nos "acreditaban" como cuerpo de seguridad. Incluso estaba la firma de Seguchi Tohma.

-Jajaja.

-Y hablando de Seguchi Tohma... me pareció haber visto su auto abajo, en la otra calle.

Kotaro, Haruno y Yamato se volvieron a mirar a Yuuji.

-¿Estás seguro Yuuji?

-Creo que si.

Kotaro salió disparado del departamento, la pareja se armó una vez mas y salió tras su primo. Nakano olió que algo andaba mal y salió al balcón preparando su arma. Gracias a eso, solo él pudo ver como el vehículo negro que transportaba al gerente de la productora NG salía a enorme velocidad. El sujeto buscó con la mirada hacia todos lados buscando rastros de su hermano, pero no pudo verlo, entonces entendió.

-¡Se llevó a Hiro!

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