DREAM WITHIN Ch.01

By Chekie Girls


Cap.1

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Aclaratoria:

Bueno antes de que se pongan a leer prestenme atencion! hablemos un poquito de los esclavos del fic, en primera son esclavos de un reino oriental asi que por lo tanto el concepto de "esclavos" como tal no es el mismo que el de los occidentales, ellos adornan a sus esclavos para que se vean agradables a la vista y ademas sean apetecibles, los visten bien, los mantiene limpios e impregnados con multiples y deliciosas fragancias a algunos les ponen escarchas, joyas, les maquillan, etc, etc, etc... y el que sean obsequiados algunos de ellos no quiere decir que dejen de "decorarlos" asi ^^;; claro son esclavos de *placer* no esclavos de labores caseras y esas cosas y si les queda alguna duda respecto a esto escribanme a red_queen216@yahoo.com bueno sin mas que decir continuen con el fic.




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Era una hermosa mañana al parecer porque podía oír a sus hermanos peleando en el jardín, otra noche mas de insomnio, sintió como uno de los sirvientes entraba silenciosamente y le servia el desayuno en una mesa cerca de la terraza, la verdad es que no tenia para nada hambre, se levanto con pereza y decidió darse un baño para comenzar aquel patético día lleno de cosas sin sentido y deberes impuestos a los cuales debía atender, que aburrido era esto de ser príncipe.


En otro lugar para ser más específicos en el barco de alguna tierra lejana, se acomodaban a los esclavos, a las mascotas, y el sinfín de baúles, los músicos empezaron el día con una tonada alegre despertando al resto de la tripulación del barco, eran un pueblo muy alegre, gran parte de la tripulación empezaban a acomodar las velas y demás cosas para acelerar el viaje y el resto a preparar el desayuno, en la tarde estarían llegando a su destino. En el interior del barco, donde se hallaban los esclavos había cierta persona que estaba escribiendo escondido en un rincón, escribía con rapidez, le encantaba hacer composiciones pero eso no era permitido para los esclavos, la mayoría ni sabia leer su meta era complacer a su amo, algunos con el canto como él, con historias fantásticas de lugares lejanos, algunos con chistes, otros mas con masajes, baños, deliciosos manjares y otros...otros.... con sexo, pensaba mientras un furioso rubor cubría su rostro, haciéndole recordar las travesuras de su antigua ama, le había contado cuando le besaron por primera vez, y cuando casi se rinde ante el influjo de su prometido, a el jamás le habían besado, pero ella le había tomado aprecio, después de todo prácticamente se habían criado juntos, él era como su confesor, le había dicho ella, claro el solo le enseñaba a leer y escribir, así se lo había pedido su amo, el amo quería que su hija fuera mas culta respecto al arte de las letras. Pero ahora se hallaba en ese barco debido a su rebeldía, él debía obedecer pero eso le era imposible, es que "cuando un esclavo conocía la libertad no seria nunca de fiar" así decía la esposa de su amo, si tan solo no se hubiera pintado el cabello de ese estúpido color aun estaría con sus amos, viviendo una vida de lo mas pacifica, pero como siempre había aceptado aquel estúpido reto de la señora en fin mejor escondía su nueva composición, que le había quedado algo triste, suspiro resignado. De ahora en adelante seria mejor tratar de pensar en eso como sus recuerdos mas preciados, no creía que en esta tierra de extraños, una cultura totalmente distinta pudiera pasarle algo bueno aunque quien sabe; además el era muy optimista jamás dejaría que lo hicieran ponerse triste tan fácilmente, la vida es bella y hay que disfrutarla.

Se levanto de un salto y gritando buenos días a todo mundo allí abajo, todos se le quedaron viendo estupefactos mientras él posaba su mano detrás de su cabeza riéndose avergonzado por sus tonterías, mientras un leve rubor cubría sus mejillas, uno de los sirvientes se acerco y le dio un plato con hojuelas de avena y otro plato con frutas cortadas en trozos pequeños, bueno a pesar de haber ofendido a su amo no lo habían castigado de la manera tradicional y tampoco lo habían dejado a su suerte, aunque hubiera preferido eso, pero tenia miedo de escaparse? esa idea sonaba tentadora, ahora ya no estaba su ama que prácticamente era su mejor amiga, y tampoco estaba su otro amo Ryu-chan que era el hermano de su ama le encantaba jugar con él, en esta tierra no tenia amigos, en este mismo barco no conocía a otra persona y no porque no lo hubiera intentado en el trayecto sino porque todos se alejaban de el, porque era un mal esclavo, que tonterías, guardo el papel y la pluma y luego devoro su desayuno, tenia mucha hambre hehe.

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De nuevo en el reino de Ilion se escabullía un rubio por uno de los jardines mientras a lo lejos se escuchaba la voz de los sirvientes llamándole, pero el no iba a volver llevaba una semana allí dentro muy aburrido, claro estaba con una gripa horrible pero ya se sentía bien y quería salir de aquel lugar que lo estaba empezando a asfixiar quería dar una vuelta para comprar algún libro, le encantaba leer y escribir pensó mientras se dibuja una sonrisa picara en su apuesto rostro como si hubiera algún secreto que lo complacía mucho y aun mas por el simple hecho de ir en contra de su padre, termino de acomodarse la capucha de la capa para cubrir su rostro y que nadie le reconociera es que esos estúpidos si lo reconocían armaban aquel escándalo que molestia con la gente así, cerro la puerta con llave y salió apresuradamente.


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El barco ya había llegado a su destino, estaban desembarcando en el puerto, los sirvientes bajaban con cuidado las mascotas, los baúles, a algunos esclavos atados con unas finas cadenas, que al parecer tan delgadas, tan endebles y eran tan duras, simplemente cumplían con su función de impedir el daño y la libertad, otros esclavos iban en sus magnificas jaulas, como animales se repetía mentalmente el chico de cabellos rosas molesto jamás le había parecido bueno reclamar la libertad de los demás para el placer de otros era algo horrible, sabia que algunos abusaban fuertemente de ellos. Cuánto añoraba la libertad, en la primera oportunidad que se le presentara correría lo más rápido que le dieran sus piernas, sonrió alegre, ya nada lo ataba a su condición así que ¿porque no huir? ¿porque no intentarlo? al fin seria libre no tendría que servirle a nadie saldría de la jaula para encontrar un mundo nuevo, un mundo donde seria libre para escribir sus poesías, sus cantos, para poder hacer amigos.

No lo pensó mas apenas soltaron sus cadenas para volver a acomodarle en el carruaje salto con todas sus fuerzas, no se detuvo a pensarlo mucho cuando vio la cara sorprendida de los guardianes, corría lo más rápido que le daban sus piernas sentía como venían pisándole los talones se metió por unos callejones donde habían muchas casas arrejuntadas, tuvo que frenar rápidamente porque casi se lleva a un pequeño que estaba jugando recogió la pelota y con una sonrisa se la puso entre sus bracitos de nuevo, pero un grito le sobresalto haciéndole dar la vuelta para ver con horror como se le acercaban, emprendió de nuevo su carrera hasta que llego a una gran plaza donde se encontraban los mercaderes y un montón de gente, al fin y al cabo estaban llegando muchos barcos ese día, mercancía nueva y ese tipo de cosas, iba corriendo tan rápido que no reparo en el sujeto que venia en sentido contrario y con el que choco irremediablemente volteándole sus libros y haciendo que de su capa salieran volando una especie de libreta y una pequeña hoja. Se agacho inmediatamente haciendo una reverencia y pidiendo disculpas en el idioma de aquel reino.

El sujeto que no era ni mas ni menos que el rubio se había quedado sorprendido al ver detenidamente con quien había chocado, era una chico mas pequeño que el, vestido con extrañas ropas, tenia puesto un pantalón pegado azul oscuro, unas botas del mismo color, tenia una especie de cinto de tela que sujetaba una camisa blanca, semi abierta dejando ver parte de su bronceada piel, encima de eso tenia una especia de capa de seda azul claro llena de bordes plateados y algunos diamantes incrustados en el cuello de la capa se veía muy cómoda y liviana, junto a esto tenia un especie de turbante que cubría su cabeza se suponía que el objetivo del turbante era cubrir también su rostro que estaba al descubierto permitiéndole observarle mejor, aunque este dejaba escapar unos mechones de sus cabellos rosado....un momento ¿rosado? O.O!? tenia unos ojos de color violeta, un momento este chico era real? ¿ojos violetas? unos hermosos y cristalinos ojos violáceos que lo estaban examinando igual que el lo hacia.

El pequeño se le quedo examinándole nunca había visto a un hombre con ojos dorados, eran hermosos esos ojos, aunque salvajes y expresaban completa sorpresa y molestia, era mas alto que él y venia cubierto con una capa de color negro que con el choque le había logrado quitar la capucha mostrando su rostro de piel blanca y suave con rebeldes cabellos dorados que cubrían un poco sus ojos dándole un aspecto mas fiero y atractivo.

El chico reacciono completamente consciente de que debía esconderse rápido así que hizo de nuevo una inclinación a modo de disculpas, recogió los libros del otro hombre y se los iba a entregar cuando se dio cuenta de que el otro estaba leyendo su composición su boca se abrió en sorpresa.

-Esto lo escribiste tu? - le pregunto el chico rubio mirándole directamente a los ojos, a lo que el solo asintió con la cabeza.
-Tienes cero talento - Su boca ahora si que llego al piso, le miro furioso, retando su mirada, haciendo que el rubio quedara algo impresionado por la reacción del chico.

Justo cuando el pelirrosa le iba a replicar el insulto del otro lado se escuchaban unos gritos que decían "allí esta", maldición estaba en apuros.

-¡Idiota! -replico antes de huir de nuevo dejando olvidada su hoja y su libreta que no había notado que también perdió en el choque.

Al lado del rubio pasaron unos tipos que tropezaron con él empujándole un poco y pisoteando sus libros.

-*Baka*- pensó comenzando a recoger todo cuando se topo con una libreta de cuero que no era de el ahora que lo recordaba bien había caído fuera del cinto del chico en el choque.

La recogió y limpiándole el polvo la metió dentro de su capa ya tendría tiempo luego de examinarla mejor, también aquel escrito de aquel pequeño que tubo la osadía de decirle idiota, jamás alguien se había atrevido a tanto, y esa mirada llena de furia, bueno era un príncipe después de todo y al parecer ese chico era extranjero, su vestimenta, su acento al hablar quien sabe porque lo perseguían acaso seria un ladrón? no por sus ropas no lo parecía además estaba limpio y tenia un aroma delicioso, como entre dulce y ácido, como fresas parecía ser, olía muy rico talvez era un príncipe de algún reino oriental, su piel bronceada, sus ojos violetas y su cabello rosa no eran rasgos que tuvieran las personas de su reino, movió la cabeza contrariadamente como un extraño podía causarle esa impresión? eso no le pasaba a el que nunca le interesaba nadie.


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Notas:

Cathain: AHHHHHHHHHH al fin termine esto ^o^ después de tantos debates vía msn con mis colegas =p hemos decidio cambiar algunas cosas mas y dejar otras tantas iguales ^_^UU esperamos que sea de su agrado este fic, pronto entraremos en debate para el 2do capitulo (siento que estoy sonando como un senador o algo así -_-U) lo único que puedo prometer es el toque Lemon de Saiyi-chan a la que lograremos quitarle su vergüenza para publicar algo así, la llevaremos a cierto lugar WUHAHAHAHAHAHA ............

by the way gravitation no es nuestro es de Murakami-sama pero como lo adoramos ^.~