lunes, 17 de agosto de 2009

DREAM WITHIN Ch.05

By Chekie Girls



Cap. 5





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Sus miradas se cruzaron, Shuichi flaqueó ante el rubio, esa mirada tan intensa clavada en él hizo que su cuerpo comenzara a temblar. Con algo de inseguridad avanzó hacia su amo, quedando a escasos centímetros el uno del otro.

-Esto... yo...-
-Que demonios estabas haciendo?!- Eiri lo agarró de la muñeca jalándolo dentro de la habitación.
-Suéltame me haces daño!-
-No tienes claro aun que eres mi esclavo verdad?- con brusquedad lanzo al chico sobre la cama. Shuichi se incorporó un poco sobre esta, se frotó con una mano la muñeca de la cual su amo lo había agarrado anteriormente.

Eiri comenzó a despojarse se sus vestimentas de una manera rápida, hasta quedar totalmente desnudo frente a los ojos del pequeño quien lo miraba con miedo y asombro.
-Que... que estas haciendo?-
-Cállate!- tendió al muchacho en la cama de un empujón, sujetando con una mano ambas muñecas de este por encima de su cabeza, con su mano libre trataba de desvestirlo.
-Es que estas loco? Para! Déjame!- Shuichi se movía tratando de liberarse. Un fuerte beso sobre sus labios lo silenció, su cuerpo quedó inmóvil por un instante. Notó como la lengua del rubio presionaba contra sus labios tratando de abrirlos para entrar en su boca, así lo hizo. El beso se hizo mas apasionado, mas húmedo... Shuichi empezaba a devolvérselo entrelazando su lengua con la de este, con algo de timidez al principio. El beso se prolongó algunos minutos, lo suficiente como para haber saboreado a gusto la boca del otro. Eiri dejó los labios del pequeño a la vez que liberaba sus brazos. Shuichi quedó tendido en la cama, con los ojos abiertos, respirando agitadamente, aquel beso lo había desconcertado por completo.
Eiri volvió a su labor de intentar quitarle la ropa, en respuesta el chico volvió a forcejear para tratar de evitarlo.
-No quiero Yuki! Para!-
-he dicho que te calles, eres mi esclavo y harás lo que yo te ordene- sin cuidado alguno quitó toda la ropa casi rasgándola, hasta dejar el pequeño cuerpo desnudo frente a él.

El chico de ojos violetas estaba asustado, no podía hacer nada contra Eiri por mucho que lo intentase, tenia mucha mas fuerza que él.
El rubio miro el frágil cuerpo que se exponía ante él, deseó recorrerlo con sus besos y caricias, sencillamente era hermoso.
Se tumbó a su lado, casi encima de él, pegando sus cuerpos, sintiendo la piel cálida y desnuda del muchacho contra la suya. Pronto volvió a atrapar sus labios, sintió como Shuichi se resistía al beso, intentaba apartarlo de él empujándolo con sus pequeños brazos.

-No te servirá de nada que hagas eso...- mordió ligeramente los labios del pequeño, provoco un grito ahogado por parte de este. Shuichi volvió a intentar librarse de la prisión que su amo le tenia impuesta, pero esto solo hacia que la excitación de este fuera mayor.
-Yuki por favor... no quiero!- golpeó con sus puños débilmente el pecho del rubio, quien paró los golpes volviendo a sujetar sus muñecas.
-Te he dicho que te estés quieto, si no lo haces tendré que atarte las manos, y tu no quieres eso verdad?- negó con la cabeza, sintió como sus lagrimas estaban a punto de salir de sus ojos violetas, dejó de ejercer fuerza sobre su amo, este lo soltó.
-Así me gusta, que obedezcas a TU AMO- Eiri besó su cuello, deslizó una mano por el contorno de aquel cuerpo, acariciándolo, hasta llegar a la cadera, allí apretó un poco su mano contra la suave piel.
-Por favor... no...- Shuichi no hacia mas que sollozar casi en silencio, de vez en cuando se movía un poco como un reflejo para librarse del rubio, suplicando en voz baja que se detuviese.

Eiri bajó hasta la altura de la cadera del pequeño, sin más envolvió su sexo semi erecto con la boca. Al contacto de su piel con la boca de su amo, Shuichi dejo escapar un gemido, sujetó las sabanas con fuerza. Se levantó un poco, apoyándose en la cama sobre sus antebrazos quedando expuesta ante él la visión de Eiri metiendo y sacando su ahora erección en su boca, a una velocidad no muy rápida, lamiendo con su lengua todo lo que podía.
Quería morirse, se sentía totalmente avergonzado por lo que le estaba haciendo y mas aun por que eso le estaba gustando demasiado. Volvió a dejarse caer sobre la cama, sus suplicas para que parase se habían convertido en gemidos que cada vez eran mas sonoros. Eiri de vez en cuando tornaba su mirada para ver la cara de su esclavo, le estaba excitando bastante el ver a ese niño de esa manera, respondiendo así ante sus caricias.

En un momento Eiri notó como el chico explotaría en cualquier instante, despacio apartó su boca, saboreando una vez mas la dolorosa erección.
Dirigió sus labios al vientre de este, lo beso, beso su ombligo jugando con su lengua, haciéndolo estremecer una vez mas.

Shuichi estaba extasiado, no creía lo que estaba ocurriendo, tenia a su amo, a la persona de quien se había enamorado haciéndole todas esas cosas, y lo mas gracioso es que lo que había empezado para él como una tortura se estaba convirtiendo en el mejor de los placeres.

Eiri pasó su lengua desde el ombligo hasta el pecho, deleitándose con este, lamiendo y besando toda la superficie con besos apasionados, arrancando mas de un gemido al pequeño. Con sus manos acariciaba toda la piel que encontraba a su paso, sintiendo su suavidad y calidez. Deslizó sus labios por el cuello que se exponía ante él, haciendo que Shuichi inclinara su cabeza hacia atrás, en un momento se encontraba de nuevo besando aquellos dulces labios, se deleitó con ellos un buen rato, después los dejó para centrarse en su oreja, la lamió y mordisqueó suavemente, para después volver a aquellos deliciosos labios que lo habían envenenado con su dulce néctar.
Se dejó caer sobre el pequeño, dejando su cuerpo aprisionado por el suyo. Con una mano apretó su trasero forzándolo a levantar su cadera hacia la suya propia, Eiri empezó a moverse lentamente, haciendo que sus erecciones rozasen una con la otra.

Shuichi quiso estar aun mas pegado a él, sentirlo aun mas, descargar de una vez todo ese placer acumulado en tan pocos minutos, un placer que ya le resultaba doloroso. Lo abrazó pasando sus brazos por su cuello, atrayéndolo contra sus labios con fuerza, el calor que nacía en su interior envolvió su cuerpo completamente, haciendo que se retorciera bajo el cuerpo del rubio.
-AH! Yuki!- el beso fue roto por un fuerte gemido que fue a parar a los labios de Eiri, apretó aun mas sus caderas contra el, derramándose entre ambos vientres.
Sus brazos resbalaron desde el cuello del rubio hasta quedar sobre la cama. Eiri lo miró, verdaderamente parecía un ángel inocente, pero a la vez era tan excitante... se echó a un lado, dejándolo respirar con mas tranquilidad, en breves segundos comenzó a besarlo de nuevo, esta vez mas suavemente. Bajó su mano hasta el vientre de Shuichi, con sus dedos recogió parte del liquido que había quedado derramado, invadió con sus dedos húmedos la boca del pequeño, haciéndolo abrir los ojos al notar el extraño sabor. Llevo esa misma mano hasta la entrada de Shuichi comenzando a acariciar la zona.

-Que... que estas haciendo ahora?- se sentó en al cama de golpe, sobresaltado por aquel roce, aun con la respiración algo agitada.
-Como que qué estoy haciendo? No creerás que ya hemos acabado no?-
-Que? Aun hay algo mas?- para el ya había sido suficiente el placer que su amo le había proporcionado.
-Tu ya estas satisfecho, pero que pasa conmigo? No tengo la culpa de que seas tan... "rápido". No lo vamos a dejar hasta que yo este satisfecho- de nuevo lo tumbó sobre la cama, el pánico volvió a hacer presa de Shuichi, este volvía a patalear intentando quitarse al rubio de encima.
-Deja de comportarte como un estúpido crió! Debes estar acostumbrado a hacer este tipo de cosas, así que sabrás como satisfacerme- en ese momento la sola idea de que su esclavo hubiese pertenecido a otras personas antes que a él le molesto bastante.
-Yo... no se como satisfacer a otras persona....-
-Que?- el rubio lo miró con sorpresa.
-Nunca he hecho esto antes...- volvió la cara a un lado mordiendo su labio inferior en señal de vergüenza.
-Nunca has...- Eiri soltó una risita irónica, en cierto modo satisfecho -Así que esta será tu primera vez...-
-Mi primera... vez?- un escalofrió recorrió todo su cuerpo, noto como sus mejillas se sonrojaban.

Eiri se recostó de nuevo a su lado, besándolo con calma. En su cabeza rondaba una pregunta; como era posible que siendo un esclavo nunca hubiera tenido sexo con alguien? En el fondo se alegró de ello, de esa forma podría enseñarle a ser el esclavo perfecto.
Con una mano acariciaba el pecho del pequeño, la bajaba hasta su abdomen y la volvía a subir, acabó por llevarla hasta la entrepierna, perdiéndose por aquella zona, recorriéndola sin dejar rincón alguno. Le separó un poco las piernas, llevando uno de sus dedos hasta su entrada-
-Yuki... yo... estoy asustado-
-Baka... no te voy a matar ni nada por el estilo, así que deja de decir estupideces-
-Pero...-
-Cállate- Shuichi , cerro los ojos y apretó los dientes cuando sintió como su amo empujaba un dedo dentro de él.
-Yu... ki...- lo abrazó con fuerza. Eiri lo beso, comenzando a mover su dedo despacio, cuando Shuichi se hubo acostumbrado un poco introdujo un segundo dedo, esta vez noto como el chico se tensaba algo mas. Acaricio su mejilla apartando un mechón de pelo rosado de su cara, sus dedos comenzaron a moverse en su interior, consiguiendo que se acostumbrara poco a poco a esa sensación.

El muchacho comenzó a moverse un poco, buscando el compás de su amo, en un momento ya estaba bastante excitado, facilitando así el trabajo, gimiendo contra los labios de Eiri.

-OH! Yuki!- movió su cabeza hacia atrás arqueando su espalda para que el contacto fuera mayor. Su erección ya empezaba a gotear de nuevo sobre su estomago, entonces el rubio paró lo que estaba haciendo y saco sus dedos.
-No quiero que termines todavía, y si no paro, es eso lo que va a pasar- Shuichi abrió los ojos y se sonrojo frente a esas palabras. Su respiración seguía agitada, algunas gotas de sudor se dejaban ver sobre su cara.

Eiri ya no podía esperar mas, deseaba hacerse dueño de su cuerpo, de su primera vez... se posiciono entre sus piernas, separándolas lo suficiente. El pequeño cerro los ojos tan pronto como sintió la erección de Eiri rozando su entrada.

El rubio coloco sus manos en las caderas del chico y comenzó a empujar un poco hacia dentro, la boca de Shuichi se abrió, pero por una vez no dijo nada, sujetó con fuerza las sabanas entre sus manos.
Eiri comenzó a resbalar dentro de él lo mas lentamente que podía. Su interior seguía siendo muy estrecho, a pesar de que lo había trabajado bastante.

-Yuki...- sus ojos estaban a punto de derramar una lagrima - me... me duele- Eiri se detuvo un momento,
-Ya veras como después no te duele nada, te acabaras acostumbrando- al instante volvió a sujetar las caderas del chico tratando de entrar en él. Shuichi seguía sujetando con firmeza las sabanas y mantenía un poco levantada la cabeza, mirando como Eiri intentaba invadir su cuerpo. Apretó los dientes para no gritar, pero no sirvió de nada que lo hiciera.
-ARGGGGGGG!!!!!!!! - el dolor sacudió todo su cuerpo cuando sintió que su amo ya formaba parte de él. Inclino su cabeza hacia atrás, cerrando los ojos por completo, un par de lagrimas rodaron por sus mejillas mezclándose con las gotas de sudor que bañaban su rostro sonrojado.

El rubio sintió un poco de tirantez dejando escapar un gruñido de su garganta.
Ambos quedaron en silencio, solo podía oírse la entrecortada respiración de Shuichi acompañada por débiles gemidos de dolor. Eiri abrió los ojos para ver al muchacho, se inclinó sobre él apoyándose con sus brazos en la cama, buscó sus labios y los beso de nuevo.

Shuichi se estremeció por completo ni siquiera era capaz de abrazarlo, no era capaz de moverse. Eiri comenzó a moverse despacio, su respiración empezaba a ser algo inestable, tenia sus dorados ojos clavados en los violáceos del otro. Ese chiquillo se veía adorable, esas mejillas sonrojadas, las gotas de sudor brillando sobre su rostro, sus labios un poco separados, y sus ojos... esos ojos tan llenos de confianza, confianza que Shuichi había puesto en él, nadie debía mirarlo de esa forma, esa clase de dulzura podía resultar peligrosa.
El pequeño pasó sus brazos alrededor del cuello del rubio, dejándolos resbalar hasta quedar sobre la espalda de este, atrayéndolo hacia él de forma que Eiri quedó mas recostado sobre su pequeño cuerpo, apoyando parte de su peso en sus antebrazos, quedando sus rostros aun mas cerca.

Shuichi Comenzó a moverse bajo el cuerpo de su amo, gimiendo sin reparo alguno, Lo abrazo con mas fuerza e intento conseguir el mismo ritmo que el, el dolor ya había pasado totalmente, empezó a moverse estupendamente, manteniendo un ritmo lento pero constante.
-Yuki! AH! No pares... - Envolvió sus piernas en la cintura de su amo, buscando un contacto mayor con él mientras disfrutaba de todas aquellas sensaciones nuevas. Estas sensaciones eran peligrosas para Eiri, no debía desear a ese muchacho con tanta pasión, no debía tratarlo tan cuidadosamente, por un momento necesito recordar las reglas del juego, de que manera debían ser las cosas, no dejaría que la dulzura de ese niño acabase con él.

-Oh... YUKIII...- el escritor salió de sus pensamientos, Shuichi lo miraba con los ojos entre abiertos, sus finos labios ahora brillaban abriéndose un poco mas -Yuki! Por favor! No... pares! Voy a...- abrazo al rubio lo mas fuerte que pudo, clavando sus dedos en la espalda de este, se arqueó contra su amo, abriendo los ojos de par en par para luego cerrarlos con fuerza, sus caderas se movieron involuntariamente contra las de Eiri, dejando escapar un fuerte grito seguido del nombre de este, volviendo a derramarse sobre sus vientres.
Un intenso temblor sacudió su pequeño cuerpo , Eiri aumento el ritmo, de su boca escaparon unos débiles gemidos que se confundían con su agitada respiración, cerro los ojos profundamente para acabar explotando en su interior.

Shuichi permanecía con los ojos cerrados, su respiración aun alterada, dejó caer sus brazos uno a cada lado de su cuerpo, totalmente rendido y tembloroso. Eiri no podía apartar su mirada de aquellos ojos, que permanecían entreabiertos, incluso después de haberle robado su primera vez seguía manteniendo esa inocencia y esa pureza que lo caracterizaba. Con cuidado salió de su interior, haciendo que Shuichi gimiera una vez mas casi inaudiblemente.
Se sentó a su lado, mirando hacia el balcón, el sol se estaba poniendo, la hermosa vista podía divisarse desde la cama.
-Eh, Yuki...- la calmada voz de Shuichi le hizo que lo mirara. -No ha sido tan malo como me habían dicho otros esclavos...- sonrió -Gracias Yuki-
-Por que me das las gracias?-
-Por... mi primera vez...-
-Baka... no tienes que darme las gracias por algo así, además, no va a ser la única vez... vamos ha hacerlo de nuevo... ahora...-
-Que? Que estas diciendo? No me has pervertido ya bastante?- Vio como Eiri se acercaba lentamente a él, con misterio y sensualidad
-Es... espera un momento!- sus rostros quedaron a escasos milímetros el uno del otro.
-No era eso lo que me decías hace un momento... además, no era yo el que gemía descontroladamente, o ya no te acuerdas?- besó el cuello del pequeño mientras envolvía con su mano el sexo de este, haciendo que se sonrojara. Comenzó a acariciarlo lentamente.
-Ah! Yuki!-
-Ves como si quieres hacerlo otra vez?-
-Yo... si...-
-Tenemos toda la noche por delante...-



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Notas de Saiyi:
Jeje pues aquí esta el lemon!!!!! ^///^ (que complicadito es escribir esas cosas...) No os quejareis no??? :P (voy a acabar dedicándome a escribir lemon por culpa de Ai ) estarás contenta no niña??? XDDD las cosas que me hace escribir... ^_^u
Ya meteremos algún que otro lemito mas por ahí... a petición de Ai, k no piensa en otra cosa... XDDDD ojala les haya gustado ^_^




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Notas de Cathain:

o.o *blushed* xDDDDDDDDD uff q calorcito esta haciendo en el ambiente, Dios que don le has concedido a saiyi-chan xp rayos q calor esta haciendo, tengo las mejillas sonrosadas XDDDDD nahhh q sigo igual de pálida ^^;; necesito ir a la playa, bueno para que negarlo si estoy algo rojita, pero un poquito nomas xp
Ella escribe en una semana, q rápida ^^U su musa esta bien alimentadita o.ô q le das de comer tia? son los remixes de gravi, no? ? bueno la mía anda algo perdida la verdad, aunque me han salido varias cositas ya pero nada concreto aun hehehe, en fin supongo q a mi me tocara lo q sigue, ay! es q no puedo esperar a poner aquellos tios semidesnudos *.* sudando... *suspiritos*... Yuki ~.~ ... Hiro... ~.~ bueno mejor la dejo hasta allí, además, q nose aun cuando será aquella escena, ya quisiera yo ser Shuu xD tener a Yuki para mi sola *sigh* ai-chan me va a matar xDDDDDDD y no solo ella xD... Yuki *.* bueno pronto verán la "perspectiva de un seme" xD q loco imaginen un fic con algún titulo así XD si lo se estoy frita pero q le vamos a hacer ^^;; creo q estas vacaciones me las pasare en el lugar q me reserve en aquel mani... cof* en alguna isla tirada en la arena bahh no lo creo, no me gusta q se me pegue la arena en todo el cuerpo ^^U
Ai-chan anímate eh, mira q te necesitamos en forma para los futuros limoncitos ~.~ Ainoahhh este capitulo es para vos ^.~ animo cosita xp
Bueno mejor dejo lo dulce y la lata, Matta ne!!!

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Notas de Ai:


holaaaa ^^ k tal? jajaja Saiyiiiiiiiiiiiiiii te salistes con el fic joder con el lemon, niña tienes talento
deberias hacerte escritora especializada de lemons *-* serias Yuki Eri pero en tia XDDD brrrr noooo no le kitaras
el puesta a Yuki-sama jejej ^^UU esto XDDD volviendo al tema me encanta como enfocastes la primera vez de Shuichi ^^
me la imaginaba exactamente igual *-* AAAAAAAAAAAA KIERO SER SHU-CHANNN yo tambien kiero un poko de Yuki ._.
Por favorrrrrrr dejanos tu opinion porfavorrrr ._. lo nesesitamosss ._. deja tu opinión!!! deja tu opinión!!!!

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Comentarios, dudas, y todo lo k kieras a chekie_girls@yahoo.es gracias ^_^

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