DULCES Y SORPRESAS Ch.21

Dulces y sorpresas.

Cap. 21

By Saiyi-chan

********************************************************************

-Tienes tres segundos para ponerte a trabajar!- gritó K apuntando con una de sus armas a la cabeza del cantante de cabellos rosados.

Desde que había llegado a NG hacia mas o menos una hora, Shuichi permanecia en un rinconcito de la sala de ensayos, sentado en el suelo de cara a la pared con las piernas encogidas y sus brazos abrazando a las mismas; su cabeza se escondida en su pecho, dejando escapar varios suspiros en leves intervalos de tiempo. Ni siquiera la cercanía de aquel arma en su nuca le hacia volver a la realidad.

-Ok, estas acabando con mi paciencia!- K sujetó el arma con ambas manos y separó un poco las piernas tomando posición dispuesto a disparar.

-K-san, no creo que sea necesario usar eso.- intervino Hiro en defensa de su amigo, mostrando una sonrisa nerviosa.

-Es necesario! One... two...-

-No espera un momento! Podemos arreglarlo!- en un intento por salvar al cantante, Sakano se lanzó sobre el americano, quien ignoró el hecho de tener a un hombre colgado de su espalda.

-Trhee...- y sin mas disparó.

Ante tan temerosa acción por parte del manager, todos excepto Shuichi, se taparon los oídos, a la vez que cerraban los ojos con fuerza, incluso Suguru, quien había estado “tranquilamente” haciendo sus arreglos.

Hiro abrió un ojo, aun cubriéndose los oídos, para encontrar en el rostro de su amigo una expresión esta vez algo molesta debido al haber sido golpeado en la nuca por una banderita que había salido del arma con el que el manager le había amenazado.

-Oye, eso duele.- protestó Shuichi malhumorado a la vez que giraba el rostro hasta encarar al rubio mientras que con una mano se acariciaba la nuca.

-Era de mentira?- preguntó el guitarrista señalando la graciosa banderita de Japón que colgaba de la pistola, la cual decía “la próxima vez no seré yo”.

-No puedes darnos esos sustos!- un Sakano volante rebotaba contra las paredes de la sala como si de un globo deshinchándose se tratase.

-Esta vez ha sido una advertencia, la próxima será de verdad.- advirtió el manager mostrando esta vez su adorada mágnum.

*******************************************************

Tatsuha se había quedado embobado mirando el rostro del cantante de NG mientras este dormía abrazado posesivamente a Kumagoro.

-Ay... cuanto daría por ocupar el lugar de Kumagoro...- esta vez su mirada se tornó algo amenazante sobre el peluche. –maldito conejo... siempre tan sonriente, tan cerca de mi Sakuma-san, duchándote con él, durmiendo con él, comiendo con él! por que me pasa esto a mi?- con un gesto dramático se cubrió el rostro, secándose unas lagrimitas que ni siquiera tenia.

-Los amigos de Kumagoro son mis amigos na no da.- murmuró Ryuichi entre sueños, haciendo sobresaltar de paso a Tatsuha.

-Me haré amigo de Kumagoro!- sonrió esta vez bastante animado.

Con aquel pensamiento salió de la tienda de campaña, dirigiéndose hacia el baño dispuesto a darse una ducha.

En el interior de la tienda, Ryuichi esbozaba una sonrisa, abriendo seguidamente sus ojos azules los cuales complementaban una expresión interesada, la cual no tenia nada que ver con aquel apacible rostro infantil que mostraba hacia tan solo un par de minutos.

-Parece que alguien esta celoso de ti Kumagoro.- le habló al conejito quien parecía sonreír ante aquello. –creo que tendré que arreglarlo de alguna forma...- sus ojos azules dedicaron una mirada interesada a la salida de la tienda.

El menor de los Uesugi procedió a abrir la llave del agua, dejando que esta cayera templada sobre su piel desnuda. Tras dejar que el agua mojara bien su piel, tomó el jabón y con calma comenzó a enjabonarse.

-Oh Ryuichi... como me gustaría que estuvieras aquí conmigo...- murmuró para si mismo a la vez que dejaba escapar un suave gemido cuando pasó sus manos sobre su pecho.

Abrió los ojos sorprendidos y sin atreverse a mirar hacia atrás cuando unas manos se posaron sobre su cadera, presionando unos dedos sobre la piel mojada.

-Necesitas que te enjabone la espalda?- preguntó una voz sumamente sensual sobre su oído.

Tatsuha tan solo pudo dejar escapar un pequeño grito de sorpresa. Suspiro nervioso sin atreverse a mirar hacia atrás, no haciéndole falta para saber perfectamente de quien se trataba. Inclinó la cabeza un poco hacia atrás, dejando que un escalofrío recorriera su cuerpo cuando sintió como aquel que estaba tras él, pegaba su pelvis contra su trasero, frotando su cuerpo contra el suyo de forma incitante.

-No me has contestado, Tatsuha.- moviendo sus manos hacia el vientre del mas joven, Ryuichi mordió la oreja de este, arrancándole un evidente gemido.

Una vez que reaccionó a la presencia de su ídolo tras él, Tatsuha movió su cuerpo contra el del otro, sintiendo contra su trasero el miembro semi erecto del cantante, provocando aquella situación una perfecta erección en si mismo.

-Por que no me haces otra cosa?- esta vez el menor de los Uesugi giró sus rostro hasta encontrarse con aquellos intensos ojos que lo miraban interesados.

-Como que?- preguntó de forma desafiante.

-Pues por ejemplo esto.- sus labios atraparon posesivamente los del cantante, quien respondió abriendo su boca para dejar entrar la lengua del otro.

Tatsuha se giró con cuidado de no romper el beso, quedando totalmente frente a Ryuichi, quien lo sujetó con fuerza de la cintura para atraerlo hacia su cuerpo con un movimiento algo violento, el cual despertó un nuevo gemido por parte del mas joven quien rompió el beso para morder su propio labio inferior.

El cantante alargó uno de sus brazos, tanteando hasta encontrar la llave del agua, la cual cerró para seguidamente recorrer con esa mano el trasero del menor de los Uesugi. Por su parte, Tatsuha volvió a inclinar la cabeza hacia atrás, indicando a Ryuichi con una mano sobre su nuca, que besara su cuello.

Así lo hizo. La lengua del cantante se deslizó deseosa por aquella piel mojada, obteniendo leves gemidos por parte del mas joven, quien llevó una de sus manos hasta alcanzar el miembro de su ídolo, procediendo a masajearlo con necesidad.

-Mmmm... veo que quieres llegar mas allá de un simple beso verdad?- le preguntó Ryuichi de forma divertida a la vez que le pellizcaba de forma algo dolorosa uno de los pezones.

-Ahh!- un grito placentero escapó de su boca ante aquella acción tan agradable, presionando a su vez la erección del cantante con su mano. –no me dirás que tu también ibas a conformarte con un beso.- murmuró de forma entrecortada debido a la agitada respiración.

-Puedes apostar que no.- pronunció sobre los labios de Tatsuha, pasando seguidamente su lengua por ellos.

El menor de los Uesugi seguía acariciando con insistencia el miembro erguido de Ryuichi, dedicándole caricias tanto suaves y lentas las cuales hacia jadear al cantante sobre sus labios, como dedicándole caricias demandantes; presionando sobre la piel y moviendo su mano de forma rápida y precisa.

Soportando aquellas caricias sobre la sensible piel y con la difícil tarea de tratar que estas no lo desconcentraran de su labor, Ryuichi deslizó su boca por el pecho del mas joven, mordisqueando los pezones ya endurecidos de este, bajando seguidamente hasta llegar al vientre, provocando con este movimiento que Tatsuha dejara de masajear su miembro. Sus labios succionaron con necesidad la piel de aquella zona, dejando una evidente marca en la misma, como si de un tatuaje se tratase.

-Ryuichi...- murmuró el mas joven cerrando los ojos, sintiendo como la lengua de su ídolo jugaba sobre la punta de su miembro casi sin rozarlo. –metetela entera en la boca.- le pidió acompañando a un incitante movimiento de caderas.

Ryuichi sonrió ante la petición, dedicando una mirada al rostro sofocado del mas joven, procediendo a pasar esta vez su lengua por toda la longitud. Tatsuha gimió ante tal caricia, tomando el cabello del cantante con una de sus manos, acercando la cabeza de este aun mas a su erección.

Sin intención de hacerlo esperar mas, Ryuichi envolvió con sus labios la longitud, sacándola despacio de su boca para volver a introducirla esta vez a mayor velocidad. Una vez con el miembro dentro de su boca nuevamente, pasó la lengua de forma juguetona por la punta, recogiendo el sabor del liquido que comenzaba a escapar, procediendo enseguida a mover sus labios sobre la longitud, sin perder en ningún momento el juego que su lengua ejercía sobre la misma.

-Ah! eso es... eso es lo que quiero... mmmm...- Tatsuha estiró un brazo hasta apoyar la mano sobre el hombro del cantante, presionando la piel de este con sus dedos.

Ante aquella excitación extrema por parte del menor de los Uesugi, Ryuichi detuvo sus caricias; sacó con suma lentitud el miembro húmedo de su boca, acariciando a su vez la longitud con los dientes. Debido a aquella acción, Tatsuha se quejó dejando escapar un gruñido, guiando nuevamente la cabeza de su ídolo hacia el que quería que fuera su objetivo. Pero esta vez no lo consiguió.

Ryuichi elevó el rostro para observar el del mas joven, quien parecía mirarlo de forma amenazante y suplicante a su vez. Dejó escapar una risita ante el estado en el cual había dejado a Tatsuha, levantándose a continuación para colocarse frente a este.

-Túmbate.- le indicó el cantante con voz demandante, dedicándole una mirada casi de superioridad.

El menor de los Uesugi parpadeó un par de veces en un gesto algo confundido, pero aun así, accedió a la petición de aquel hombre. Viniendo de Ryuichi haría cualquier cosa que este le pidiese.

Una vez se hubo sentado sobre la loza del suelo, dejó caer su cuerpo un poco hacia atrás, estirando los brazos y apoyándose con las manos en el suelo mojado. Observó sin perder detalle y con una sonrisa enigmática en su rostro, como Ryuichi sin dejar de mirarlo, se colocaba de rodillas a su lado.

-He dicho que te tumbes.- insistió el cantante, empujando con una mano el cuerpo del mas joven hasta dejarlo totalmente tumbado sobre la loza.

Ante la excitación del menor de los Uesugi, Ryuichi pasó una de sus piernas por encima del cuerpo de este, dejándolo de esa forma acorralado entre sus piernas, quedando de rodillas y de espaldas a él para inclinarse hacia delante y quedar a “cuatro patas” para llegar a alcanzar el miembro de este con sus labios.

Tatsuha creyó morir en el momento en que se encontró recibiendo nuevamente esas placenteras caricias sobre su miembro, hallando a su vez frente a su rostro aquella exquisita erección perteneciente al cantante de NG, al igual que su entrada.

Sin pensarlo mas, elevó su mano izquierda hasta alcanzar el miembro que tanto le apetecía probar en aquel momento, guiándolo hasta llegar a alcanzarlo con su lengua, la cual recorrió la húmeda piel acompañada de su mano.

Ryuichi dejó escapar un gemido intencionado ante aquel contacto, dejando por un momento de lamer el miembro del mas joven para sacarlo de su boca quedando entre estos un fino hilo de saliva, el cual desapareció en el momento en que el cantante volvió a retomar su trabajo esta vez con mas ansias.

Saboreó las gotas que escapaban de la punta, recogiéndolas con su lengua, siguiendo el ritmo que el balanceo del cuerpo de Ryuichi le marcaba. Sin poder aguantar mas aquella situación de deseo, llevó su mano derecha hasta su propia boca, dejando esta vez de acariciar la erección con su lengua para lamer sus dedos, de los cuales dos de ellos los llevó inmediatamente a la entrada del cantante, introduciéndolos de una vez.

Ryuichi volvió a dejar escapar un gemido, el cual fue acompañado por un movimiento algo brusco de su cuerpo contra esos dedos, los cuales trataban de enterrarse con ansias en su interior.

-Ryu... Ryuichi, no pares ah! no pares ahora!- le indicó el mas joven moviendo las caderas hacia el rostro del otro, acariciando a su vez la erección del mismo de forma demandante, de la misma forma que sus dedos se movían en aquel cálido interior.

El cantante de NG esbozó una sonrisa traviesa, llevando una de sus manos hasta sujetar el miembro por la base, procediendo a meterlo nuevamente en su boca para succionar con fuerza.

-Ah! dios! Eres increíble si!- su cuerpo se movió de forma algo violenta, sintiendo cada vez mas intensas las caricias sobre su erección que no tardó en vaciarse en la boca del cantante.

Las caricias de Tatsuha sobre la erección palpitante de Ryuichi se volvieron mas débiles tras aquel orgasmo provocado por su ídolo, al igual que esta vez sus dedos se detuvieron en el interior del mismo. El cantante de NG se movió sobre el mas joven, haciendo de esta forma que este lo dejara libre de caricias para posicionarse esta vez entre sus piernas de cara a él.

Los ojos brillantes del menor de los Uesugi se abrieron para enfocar ante ellos la excitante visión de su ídolo lamiéndose los labios, recogiendo con su lengua las pequeñas gotas que habían quedado alrededor de su boca.

Se incorporó un poco apoyándose sobre sus antebrazos cuando observó absorto como Ryuichi comenzaba a acariciar su propia erección, mostrando en su rostro una expresión de completo deseo. El cuerpo del mas joven se paralizo ante aquella visión. No perdió detalle alguno de cada movimiento, de cada mirada, cada expresión. Hasta que tras mostrar una sonrisa satisfecha, Ryuichi acabó derramándose en su cara, provocando con ello que el menor de los Uesugi abriera su boca tratando de recoger parte de aquel ansiado liquido.

Antes de que a Tatsuha le diera tiempo a lamer las gotas que habían quedado sobre sus propios labios, Ryuichi acercó su miembro a su rostro, rozando los labios del mas joven con la punta, dejando que saboreara el cálido liquido sobre la propia piel.

Cuando creyó que había sido suficiente, el cantante se separó del otro, levantándose para dirigirse a abrir la llave del agua y dejar que la misma recorriera su cuerpo algo sudoroso.

Tatsuha le dedicó una mirada confundida, levantándose seguidamente para acercarse a su ídolo por la espalda y apoyar su rostro sobre el hombro de este.

-Te estas refrescando para seguir?.- murmuró al sentir el agua tibia rozar también su cuerpo.

-Tatsuha, haz una cosa.- Ryuichi se giró hacia él con una mirada prometedora. –ponte aquí debajo.- le indicó tomándolo de los brazos y colocándolo bajo la manguera de la ducha.

El menor de los Uesugi obedeció sin decir nada, tan solo mantuvo una sonrisa incitante mientras seguía las indicaciones de su ídolo, deseoso de averiguar que era lo que se le había ocurrido esta vez.

-Y ahora...- sus ojos azules se clavaron intensamente en los del mas joven, a la vez que abría al máximo el agua fría, haciéndolo sobresaltar al sentir el agua helada sobre su cuerpo cálido. –...date una ducha fría.- sonrió de forma divertida ante la mirada perpleja del otro.

Antes de salir del baño, dedicó una nueva mirada al menor de los Uesugi, a la vez que dejaba escapar una risita para seguidamente adoptar una expresión infantil.

-Date prisa en salir na no da!-

**********************************************

-Umh... así que ese es el problema...- K se llevó una mano a la barbilla para frotarla en un gesto pensativo.

Hiro asintió en respuesta después de la detallada explicación de lo ocurrido que tuvo que ofrecerle a su manager al verse amenazado por su mágnum.

El cantante de cabellos rosados seguía en aquella posición encogida, con la diferencia de que esta vez jugaba con sus dedos índice y anular sobre el suelo, asemejando estos a un par de piernas que caminaban hacia delatante y hacia atrás repetidas veces.

-Tenemos que hacer algo urgentemente! Si Shindou-kun entra en depresión y no puede escribir canciones será el fin de BL! El presidente ya no querrá confiar en mi nunca mas!- en un gesto desesperado, Sakano tomó con ambas manos el cuello de la camisa del manager. –esto no puede ocurrir ahora que vamos a preparar el nuevo disco!-

-Calma, calma.- trató de tranquilizarlo el rubio con un gesto de manos y una sonrisa tranquila.

-Iré a por una tila.- murmuró Suguru dejando su trabajo para dirigirse a la puerta. –o mejor que sean dos...- suspiró pesadamente sumándose al hábito de beber tila para así poder soportar las crisis del cantante de BL.

–Buscaremos la forma de solucionarlo.- propuso K a la vez que tomaba las manos del productor y las apartaba del cuello de su bien planchada camisa blanca con un gesto de “no toquetees mas mi camisa o te la veras con mi mágnum.”

Aquel gesto consiguió que Sakano se riera de forma nerviosa, entendiendo perfectamente aquella mirada, procediendo a sacar un pañuelo de su bolsillo para secar el sudor que recorría su rostro algo pálido.

Bajo el silencio descomunal que se había formado en la sala por los allí presentes, en el cual solo destacaba el golpeteo de los dedos de Shuichi en el suelo, una mirada interesante incluso algo intimidante por parte del manager se clavó en el cantante, consiguiendo que este respondiera con un escalofrío al sentir aquellos ojos azules sobre él, procediendo a volver la cabeza muy despacito hasta que sus ojitos entreabiertos dedicaron una mirada desconfiada al rubio. Ante aquella mirada, K esbozó una sonrisa satisfecha, dando por zanjado el plan que su mente había establecido en menos de cinco minutos.

-It´s perfect! Jajajajajaja!- rompió en una sonora carcajada asustando de paso a los presentes.

-Puedo preguntar que se te ha ocurrido esta vez?- intervino Hiro mostrando una sonrisa algo forzada, temiendo incluso por la vida de su amigo.

-Iremos a explicarle a mister Yuki lo que ocurrió.- explicó con una sonrisa a la vez que se cruzaba de brazos.

- Nos echará a patadas, lo sabes verdad?.- puntualizó el guitarrista con un deje de ironía.

-No digas cosas malas de mi Yuki!- grito Shuichi saliendo de su estado de autismo para subirse a la espalda de su amigo y morderle la cabeza.

-Eh...pero si ni siquiera cree a Shuichi...- volvió a hablar Hiro tratando de ignorar el hecho de que el cantante le estaba babeando el pelo. -... como nos va a creer a nosotros?-

-Oh! Nou problem! Se quien se puede ocupar de esto perfectamente jajajajajajaja!-

-Tu mágnum?- se burló el guitarrista, llegando a aparecer la duda en su cabeza de si ese arma funcionaria igual con el escritor que con el resto de las personas.

-Nou, tengo en mente algo mejor, algo mas... “eficaz”.-

-Como que?- preguntó esta vez Sakano extrañado e interesado a la vez por la respuesta del manager, quien curiosamente parecía que no usaría sus armas.

-Kumagoro a llegado na no da!- la cabecita del conejito de peluche se asomó a la puerta de la sala.

-El se ocupara!- K señaló en dirección a la puerta adoptando un gesto serio, dispuesto a llevar a cavo su plan sobre cualquier cosa.

-K-san, no es por llevarte la contraria, pero... un conejo de peluche?- preguntó Hiro manteniendo una sonrisa nerviosa la cual decía claramente “te burlas de mi o que?”

-Oh! Nou, nou.- señaló esta vez a Ryuichi quien asomó la cabecita por la puerta con un gesto malhumorado debido a que nadie había saludado a Kumagoro. -El! Ryuichi será quien se ocupe!- las miradas tanto se Sakano como de Hiro se centraron incrédulas en el manager.

-Yo?- el cantante de NG se señaló a si mismo tras descubrir que hablaban de él. –Yo me ocuparé na no da!- con energía elevó el peluche para agitarlo con una mano.

–Nada mejor que un rostro angelical y una actitud infantil para convencer a alguien de algo jajajajaja!.- volvió a reír el rubio americano completamente convencido de sus planes.

-Ya... el que sea Sakuma-san en vez de Kumagoro arregla las cosas.- comentó Hiro con ironía para después suspirar pesadamente. –Y tu deja ya de babearme el pelo!- alzando la mano se quitó al cantante de la cabeza, haciéndolo lloriquear como si se tratase de un niño caprichoso al que le quitan un juguete.

-Oh! Estas ahí Shu-chan!- Ryuichi se acercó enseguida al cantante de BL, quien se giró a mirarlo con sus grandes ojitos violetas llorosos.

-Sakuma-san! Snif snif.- el aludido levantó una mano saludando a su amigo con una sonrisa.

-Uhm? Hoy no viene tu amigo Ryuichi?- preguntó el manager llevándose una mano a la nuca después de dedicar una mirada y no ver a Tatsuha por allí.

-Tatsu-chan? No, ha ido ha hablar con Yuki-chan para que no este enfadado con Shuichi na no da.-

-La liamos...- murmuró Hiro llevándose una mano a la frente.

-Que? Ese idiota que tengo como cuñado se ha ido a hablar con mi Yuki?- gritó Shuichi de forma alterada, obteniendo como respuesta un asentimiento por parte de Ryuichi. –no puede ser... ahora si que estoy perdido snif, snif.- se dejó caer en el suelo quedando de rodillas en el mismo con un claro gesto de derrota.

–Uy, que te pasa Shu-chan? te ha entrado tierra en un ojo?- preguntó Ryuichi de forma inocente al ver los ojos vidriosos del cantante de cabellos rosados. –seguro que si soplo se te pasara na no da.- con una sonrisa acercó su rostro al del otro con la intención de aliviarlo.

En el momento en que Ryuichi fue a soplar suavemente sobre sus ojos, el rostro de Shuichi se contrajo en varias muecas exageradas, rompiendo a llorar de forma extremadamente escandalosa después de dedicar varios pucheros al otro cantante, quien los imitó para acabar en llanto el también.

-Te entiendo na no da. A mi tampoco me gusta cuando me entra tierra en los ojos buaaaaaaaaaaaaaaaa!- abrazando a Kumagoro negó con la cabeza, acompañando a Shuichi en aquel llanto conjunto que mas bien parecía un concurso por ver quien de los dos armaba mas escándalo.

-Crees que tu plan funcionara?- preguntó Hiro resignándose ante la penosa imagen de ambos cantantes llorando y un Sakano con fregona en mano secando el charco de lagrimas que estaban dejando en el suelo.

-Tu confía en mi.- con toda la seguridad del mundo, se dio un golpecito en el pecho.

-Que remedio...-

**************************************

-Que demonios haces aquí.- los ojos dorados de Eiri miraron fríamente a la persona que tenia frente a si.

-Hola hermanito, no vas a invitarme a pasar?- preguntó Tatsuha con una sonrisa confiada hacia su hermano mayor.

-Que te hace pensar eso?- tratando de mantenerse lo mas calmado posible, el rubio apretó los dientes en un gesto de desagrado hacia el menor de los Uesugi.

-Jeje, ya sabia que me dejarías.- ignorando la pregunta del escritor, se adentró en el apartamento esquivando el cuerpo del rubio.

Eiri murmuró varios insultos referidos a su hermano, apretando a su vez los puños tratando de controlar aquella ira que cada vez se estaba apoderando mas de él ante la presencia de Tatsuha.

-Vaya, si que se ve esto raro sin la tienda de campaña de mi Ryuichi.- comentó con gesto pensativo, observando el espacioso salón. –la casa de Hiro es muy pequeña, apenas hay sitio para una tienda tan grande.-

-No tengo tiempo ni ganas de estupideces, así que lárgate.- le propuso en un tono de voz altamente amenazante con el cual cualquier persona habría salido corriendo del lugar.

-Oye, que solo he venido a echarle una manita a mi cuñadito.- con una expresión algo ofendida se cruzo de brazos bajo la sonrisa irónica que se dibujó en los labios del escritor ante aquellas palabras. –ya se que viste ese video pero...-

-Vete antes de que empeores las cosas y la mano te la quiera echar él, pero al cuello.- le advirtió temiendo el no poder aguantar mas aquellas ganas de matarlo. –y te aseguro que yo estaré allí para ayudarlo encantado.- Con un gesto, le indicó que abandonase el lugar.

-Ey! Que por tu culpa Shuichi ni siquiera me mira!- le recriminó el mas joven con un gesto dolido.

-Como que por mi culpa?- ni siquiera aquel grito exasperado por parte del rubio consiguió que Tatsuha desistiera en su intento y se marchara de allí.

-Eso he dicho, si no lo hubieras echado...- Tatsuha miró de reojo al rubio, observando perfectamente como la venita de su frente de hinchaba cada vez mas.

-Pero como...- Eiri volvió a apretar los puños con rabia, haciendo temblar sus brazos debido a la presión ejercida. –mira Tatsuha en serio, lárgate por que no respondo de lo que te hago!- aquella amenaza acompañada de esos fríos ojos dorados, consiguió que el menor de los Uesugi tragara saliva algo asustado.

A pesar de estar siempre haciendo enfadar a su hermano mayor y de divertirse con ello, nunca lo había llegado a ver tan enfadado por algo. Temiendo por su integridad al igual que temía el que aquella rabia que Eiri estaba guardando acabara contra él, decidió quitarse de en medio.

-Si, si, ya me voy, pero que sepas que Shuichi no hizo nada, lo estas acusando injustamente.- puntualizó señalando con el dedo al escritor.

-Ahórrate los detalles y lárgate, no quiero saber nada de ti.-

Ante la nueva invitación de su hermano mayor, Tatsuha caminó hasta la puerta, murmurando a su paso lo mismo que había dicho Eiri momentos antes, pero con la diferencia de que sus palabras iban acompañadas de un grado extremo de burla al igual que de varias gesticulaciones de igual modo.

-Oye hermanito...- Tatsuha se volvió a girar hasta encarar a Eiri quien respiraba hondo tratando de calmarse. -...cuando se te va a pasar el enfado para que podamos vol...- la puerta se cerró en su cara dando un fuerte portazo. -...ver. Mira que eres desagradecido, y eso que me preocupo por tu vida sentimental!.- gritó a la vez que daba una patada a la puerta para seguidamente toser un par de veces como si no hubiera hecho nada. –bueno, iré a buscar a my honey Ryuichi!- con una sonrisa bastante estúpida en su cara se encaminó a NG en busca de su ídolo.

Eiri se recargó cansado sobre la puerta, cubriendo su rostro con una mano a la vez que dejaba escapar un hondo suspiro.

-Están todos locos.- fue a dirigirse al interior de la vivienda cuando volvió a oírse el timbre de la puerta. –te he dicho que te largues de una vez!- gritó abriendo la puerta, encontrando ante si la expresión algo confundida de Tohma. –Ah, eres tu.- volvió a suspirar esta vez resignado.

-Si, soy yo, pero si te molesto me marcho.- propuso con una sonrisa calmada.

-No estaría mal...-

-Estas de mal humor Eiri-san?- sin mas se adentro en el apartamento.

-No, estoy mas alegre que nunca no me ves?- bromeó esbozando una sonrisa que se vio perfectamente forzada a propósito.

-Tiene que ver con Tatsuha-kun? Me lo acabo de cruzar por el pasillo.- Eiri no dijo nada, tan solo procedió a cerrar la puerta y caminar hacia el salón seguido de su cuñado portando su habitual sonrisa. –te ha hecho enfadar de nuevo?- preguntó con una sonrisa divertida.

-Esta vez a traspasado el limite.- Eiri se sentó en el sofá, sacando un cigarro del paquete que acababa de empezar.

-Uhm? Que ha pasado aquí? Ryuichi-kun ha decidido marcharse a su casa.?- preguntó al hallar el salón libre de la tienda de campaña. –no me ha dicho que ya lo tenia todo arreglado.-

-.......................- Eiri tomó una calada del cigarro. –los he echado, a todos.- concluyó.

-Ha ocurrido algo?- preguntó interesado.

-Me han tocado demasiado las narices. Y tu a que has venido?- cortó sin dudarlo, aquel tema ya le tenia de los nervios como para seguir dándole vueltas al asunto.

-Debo tener algún motivo para hacerte una visita?- Eiri no dijo nada, tan solo lo miro fríamente. –esta bien, pensé que podríamos cenar juntos. Que te parece?-

-No tengo nada mejor que hacer.- se encogió de hombros de forma indiferente.

Quizás salir un rato y despejarse le vendría bien. Claro que Tohma no era la persona mas indicada para estar tranquilo...

-En ese caso, vendré a recogerte. Ahora tengo que volver a NG, tenia que salir a encargarme personalmente de unos asuntos, y pase por aquí.- ante la indiferencia del escritor, Tohma se levanto digiriéndose a la puerta, para antes de salir, dedicar una sonrisa a Eiri quien se despidió elevando la mano.

-Una visita corta...- murmuró con una sonrisa satisfecha.

**************************************

En una de las salas de NG la cual estaba destinada a la celebración de reuniones, los miembros de BL permanecían a la espera de que su manager hiciera acto de presencia en la misma.

Junto a los tres integrantes del grupo, Sakano permanecia recorriendo la sala con nerviosismo una y otra vez, mirando el reloj a cada momento y murmurando cuantos eran los minutos de trabajo que habían perdido ya.

Al contrario que el nervioso productor, Ryuichi permanecia tranquilamente sentado en el suelo, jugando con Kumagoro a “piedra papel o tijeras”, donde curiosamente el conejito tan solo sacaba papel...

-Ay... esa situación es tan complicada...- murmuró el cantante de cabellos rosados tras un suspiro.

-Vamos Shuichi, veras como K-san lo soluciona.-le animó Hiro dándole un golpecito en la espalda.

-O eso.. o lo empeora.- intervino el mas joven del grupo de forma desinteresada, recibiendo inmediatamente las miradas amenazantes de ambos amigos.

-Si esa estúpida cinta lo hubiera grabado todo y no solo lo que le dio la gana, ahora no estaría pasando esto!- en un golpe de rabia, Shuichi se puso en pie sobre la silla, colocando a su vez una de las piernas sobre el respaldo de la misma a la vez que complementaba su amenazante postura apretando sus puños.

Los allí presentes centraron su atención en el ruidoso cantante, quien parecía estar envuelto en llamas de fuego.

-Arrrrrrrrggggggggggggggggg! Shindou-kun! Bájate de ahí!- Sakano salió corriendo en busca del cantante, tratando de tirar de la camiseta de este para bajarlo de ahí. –no quiero tener que pagar mas las cosas que rompes! Me vas a arruinar si sigues así!- el productor seguía tirando del cantante esta vez sujetándolo de la cintura, pero era inútil; sus pies parecían pegados a la silla.

-Oh! Mira Kumagoro, esto es mas divertido que ese juego na no da.-

-Acabaré con todas las video cámaras del país!- amenazó convencido de si mismo ante la mirada resignada de los otros dos miembro de NL.

-Shindou-kun te he dicho que bajes de ahí! Que dirá el presidente?-

-Ya esta aquí el genial mister K!- la puerta se abrió de repente, mostrando al rubio americano con una sonrisa y portando varios pliegos de papel bajo el brazo.

Ante la inesperada entrada del manager, Shuichi desvió la mirada hasta este, dejando de esa forma que Sakano ganara en su lucha, acabando ambos en el suelo, uno sobre el otro y la silla sobre ellos, ocasionando de paso un fuerte sonido.

-Ok, cuando acabéis de jugar prestad atención. Pelase.- K se llevó una mano a la nuca mostrando un gesto calmado. –eso si, que sea YA.- inquirió cambiando aquella calmada expresión por una mirada de advertencia a la vez que depositaba sobre la mesa los papeles y su mágnum.

-Iteeee! Ves lo que has conseguido Sakano-san?- protesto el cantante aun sobre el productor, quien yacía en el suelo de mala manera.

-Ejem...- seguidamente se oyó el seguro del arma.

-Jeje, si, ya vamos.- sonrió de forma nerviosa levantándose del suelo para extender la mano amablemente a Sakano.

-Bien, como ya sabéis, estamos aquí para...- tosió un par de veces, esperando impaciente a que el productor ayudado de Shuichi, desenredara sus piernas de la silla. -... para idear un plan y ayudar a Shuichi. Claro que el plan esta ideado ya por mi jajajajaja.- recalcó soltando una sonora carcajada, a lo que los demás mostraron una sonrisita forzada.

-Un flan? Comeremos flan na no da?- preguntó Ryuichi con una sonrisa de oreja a oreja a la vez que sus mejillas se tornaban graciosamente enrojecidas.

-Nou Ryuichi, un flan no, un PLAN.-

-Eso se come no da?- su expresión cambio esta vez a una de curiosidad, a la vez que se llevaba un dedito cerca de la boca.

-Si atiendes iremos todos a comer flan.- sonrió el manager consiguiendo que los ojitos azules del cantante se volvieran mas expresivos y este asintiera enérgicamente.

K comenzó a desenrollar sobre la mesa el pliego de papel, el cual contenía el “plano” de lo que seria el plan.

-Veis esto?- el manager indico un monigote dibujado en el centro del plano, a lo que todos se asomaron a la mesa tratando de distinguir que era aquello.

-Eh.. por estar seguro... que se supone que es?- preguntó Hiro con nerviosismo, temiendo que su pregunta acabara en un balazo.

-Es mister Yuki.-

-Que? Eso es mi Yuki?- gritó alarmando el cantante de BL, señalando casi aterrado el dibujo.

-Do you have some problem?- con decisión alcanzó la mágnum.

-Eto.. no, no, puedes seguir jeje.- Shuichi negó nervioso con las manos, mostrando su mejor sonrisa forzada hacia el dibujo. –ha salido muy favorecido.-

-Este de aquí...- prosiguió el manager, recalcando sus palabras para que no hubieran mas malos entendidos. -... es Ryuichi.-

-Yo no da?- se señaló con el dedo tras mirar el dibujo. -Ah! ya entiendo que es un plan! Es dibujarnos unos a otros na no da! Me pido a Shu-chan!- con efusividad abrazó al cantante quien sonrió ante la graciosa deducción del otro.

-Y el va a ser la “cabeza” del plan?- preguntó Suguru muy bajito cerca del oído de Hiro, quien le sonrió de forma nerviosa.

-Ryuichi, quieres comer flan verdad?- preguntó el rubio americano obteniendo un asentimiento por parte del cantante. –pues atiende.- ante la petición, Ryuichi volvió a asentir varias veces, mostrando esta vez una expresión concentrada. –ok, sigamos... la misión de Ryuichi consiste en entrar en casa de Eiri-kun mediante la puerta...-

-Que raro...- murmuró el guitarrista.

-El que?- Suguru se giró hacia el con un gesto de confusión.

-pensé que usaría una entrada menos... lógica.-

-SSSSSHHHHHHH!!!- intervino Shuichi, quien se giró para mirar con un gesto molesto a su amigo a la vez que con un dedo sobre sus labios le indicaba que guardara silencio. –cállate Hiro que mi felicidad esta en juego.-

-Shuichi, no te interesa mi plan?- ante la pregunta del manager, el cantante se giró despacito hasta encararlo con una sonrisita nerviosa.

-Lo siento.- se disculpó mirando de reojo a Hiro quien le dedico una sonrisita divertida.

-Well, una vez que Ryuichi consiga entrar, hablara con Eiri-kun y le contara todo lo ocurrido. Eso es todo, explicación del plan is’t conclude.- los allí presentes le dedicaron una mirada incrédula ante tan sencillo plan. –has entendido Ryuichi?- el cantante asintió de forma aplicada, como un niño que se sabe bien al lección.

-Que? Eso es todo?- preguntó Sakano quien no había perdido detalle alguno de la explicación.

-Yes. Es un plan perfecto.- se cruzo de brazos asintiendo de forma confiada.

-Pero y el trabajo? No podemos dejarlo así como así! Que va a decir el presidente? acabara despidiéndome!-

-El trabajo no importa en este momento, almorzaremos y nos tomaremos al tarde libre para el plan jajajajaja.- ante las palabras de su manager, Shuichi asintió con efusividad dándole la razón, ahora lo mas importante era llevar a cavo aquel plan.

-Pe... pero...-

-Let’s go!-

Continuara.

*******************************************************************